La paz
VIII Edición03 de agosto de 2020Eugen Relgis
Una flor ignorada,
arraigada en la roca más estéril y dura,
se levanta del odio en torbellino
sobre el mar tenebroso de la vida.
Y crece solitaria, abre los pétalos
de su luz en serenas alboradas
-más blanca que una aparición divina-
hasta encerrarse en sueños al anochecer.
Espera suplicante
que la abracen las olas de la vida;
que la arranquen del páramo
de la desolación,
encendiendo la noche con su luz.
Pero las olas huyen de la flor de la Paz
que llama sin cesar desde la roca:
No espumarán de odio…
Tienen miedo
del encanto del sol y del amor.
Agradecemos a Aguilar la propuesta del poema.
Crédito del texto: Eugen Relgis (Rumanía, Uruguay) Ponent, cuadernos literarios, nº 2/II etapa, Cádiz, 1975, traducción de Pablo R. Troise)
Créditos de la imagen: Pixabay, https://pixabay.com/photos/path-santiago-sunflower-magic-2400885/
Le gusta recuperar poesía del pasado para los lectores del presente.
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