LXIII Edición: Temporada de lluvias
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Como parte de la temporada olímpica, hemos invitado a dos poetas de la antigüedad a dar respuesta a las justas deportivas.
Por un lado tenemos a Píndaro, que según Ignacio Montes de Oca es desconocido porque “se me antoja que una de las razones porque Píndaro se lee tan poco, es la idea que [sus] títulos sugieren al vulgo, de que sólo canta su musa golpes y heridas, hazañas de carreteros ordinarios y de púgiles […]
De reír y platicar a la nada, obscuridad total. Unos minutos, abro los ojos, y veo a cinco o seis personas a mi alrededor, a veces familiares, a veces amigos o desconocidos que suelen ser policías, paramédicos o simples curiosos, depende dónde suceda. Sus miradas siempre son iguales, de susto, preocupación o asombro. Ah y -en ocasiones- de morbo. Si sucede con familia o amigos escucho sollozos […]